Lo “normalizado” en nuestros equipos: 👉 de normalizar a ambicionar

Una mano pidiendo un ascensor. El dedo índice selecciona un botón que tiene el símbolo de una flecha hacia arriba.

¿Alguna vez has pensado en cómo normalizamos situaciones y comportamientos en nuestros equipos?

Normalizar es cuando a algo que ocurre le restamos trascendencia; eso nos hace sentir mejor ya que lo sacamos de nuestra esfera de preocupación. Es común que aceptemos como «normal» una variedad de situaciones: desde llegar tarde a un lugar, hasta mantener un desempeño mediocre e incluso tolerar maltrato…

En el mundo del coaching, sabemos que estas normalizaciones son interpretaciones personales y no necesariamente reflejan la realidad objetiva. Estas interpretaciones, aunque subjetivas, tienen un impacto profundo en nuestras acciones, decisiones y resultados. Es crucial preguntarnos: ¿me sirve pensar de este modo? Si la respuesta es no, es momento de reinterpretar y buscar nuevas perspectivas.

En ocasiones, normalizar puede ser útil. Por ejemplo, reconocer que al principio no rendimos al máximo en un nuevo trabajo puede ser una forma de motivarnos a seguir aprendiendo. Sin embargo, en muchos casos, lo que normalizamos puede esconder ineficiencias y mediocridad, y el peligro es que nos hemos acostumbrado a ellas. He escuchado gerentes que aceptan indicadores de rotación altos porque otros en la misma industria los tienen, o aceptan como normales comportamientos desajustados simplemente porque son las generaciones nuevas. Este tipo de pensamiento limita la capacidad de mejora y evolución. ¿Qué pasa si lo que normalizás en tu equipo cambiara para mejor?

No subestimes el poder de la reinterpretación. Los comportamientos normalizados pueden convertirse en barreras que afectan la efectividad y el ambiente laboral.

De normalizar a ambicionar

Te comparto una de tantas historias que ilustran esto. Un gerente, luego de trabajar estos temas en una sesión de coaching, se animó a desafiar lo “normal” en su equipo. Gerenciaba, a pesar de su juventud, una cadena de supermercados. Un día en uno de los locales, antes de empezar la jornada, reunió al personal y luego de una corta motivación les preguntó: ¿qué ven acá en el local que está fuera de lugar, pero ya es tan normal para nosotros que lo pasamos por alto sin hacer nada? Enseguida los colaboradores empezaron a decir todo lo que debía corregirse. Además, algunos se animaron a plantear cómo eso que estaba fuera de lugar, o apilado, le impedía trabajar mejor al no tener espacio. En un corto lapso de tiempo se sumaron una cantidad de ideas y las personas entusiasmadas empezaron a definir compromisos.

Quizá te preguntes, ¿y yo cómo empiezo a impactar más en mi equipo, sacudiendo el statu quo? Si te gustaría abordar comportamientos que se han vuelto “normales” y transformarlos para lograr un cambio positivo, el programa “Gerente como Coach y Mentor» es un buen primer paso.

Este programa internacional y premiado, que se dicta por primera vez a Uruguay de la mano de Coching del Talento, está diseñado para ayudarte a desafiar lo que has aceptado como normal y abrir nuevas posibilidades para tus colaboradores y tu gestión. Hablemos cómo podemos trabajar juntos para elevar tus estándares y resultados.

🔗 Conocé la propuesta completa aquí: https://bit.ly/4ccJzbM

Y contáctanos para más detalles o confirmar tu participación.

¡Transformemos la normalización en una herramienta de mejora continua!

#Coaching #Liderazgo #Gestión #DesarrolloPersonal #Transformación #CoachingEmpresarial

 

Comparte el Post