El Coaching de Equipos es una herramienta poderosa de toma de conciencia y mejora:
– Toma de conciencia del sistema que conforman los miembros del equipo, como red interconectada donde ninguno ocupa una posición inocua: lo que aporta y no aporta individualmente cada miembro, repercute inevitablemente en el sistema en su conjunto.
– Toma de conciencia de lo que está pasando en el equipo: se hacen visibles y tangibles los cambios que está necesitando el equipo como sistema, ya sea a nivel de comunicación, coordinación de acciones, roles, relaciones, procesos de cambio, clima laboral, conflictos interpersonales…
El coach es la figura que estimula a que emerja esta información en el sistema, que a veces se encuentra más o menos visible, o más o menos consciente para los integrantes del equipo. Lo hace a través de dinámicas dirigidas y de la creación de un espacio de comunicación seguro, cuidado y confidencial. Un espacio de respeto y de escucha profunda, que se apoya sobre un postulado clave: frente a cualquier tema que emerja en el equipo, todos los miembros tienen parte de la razón, pero nadie tiene 100% de la razón. De alguna manera, con este postulado se validan, y se recogen, las distintas visiones que existan en el sistema entorno a un tema para poder trabajar sobre todas ellas.
Con la información que va surgiendo, y que se va haciendo consciente, el coach acompaña a trazar acuerdos co-creados por el equipo, y a bajar a líneas de acción concretas que les permita moverse como equipo de ese lugar que no les está dando resultado.
El Coaching de Equipos parte de la base de que el sistema es inteligente y de que tiene en sí mismo todos los recursos necesarios para resolver aquello que los tranca. En ese sentido, el coach no viene a “arreglar” o aplicar recetas… Viene a acompañar y estimular este proceso de cambio para que se conecten con sus propios recursos. Y a devolverles, también, su mirada respecto a lo que va observando del equipo, que puede estar siendo transparente para ellos.
Como cualquier proceso de transformación personal, el cambio final y el grado del cambio dependerá del equipo en sí mismo: de su compromiso y voluntad de querer moverse de allí. El sistema está compuesto por sus miembros, y solo ellos tienen el poder de hacer un cambio. Igualmente, desde esta mirada sistémica que planteamos, basta con que uno cambie para que repercuta en el resto y se re-ordene el sistema. Desde nuestra experiencia, lo que podemos decir es que ningún equipo es el mismo después de una intervención de este tipo… A su vez, queda instalado en el equipo una metodología para abordar en el futuro otros problemas, temas o cambios.
El coaching de equipos es una herramienta aún no tan conocida en las organizaciones que se puede aplicar a partir de dos personas en adelante. Son sesiones entre una hora y media y dos horas, escalonadas en el tiempo. La cantidad de sesiones varía en cada caso, pero recomendamos entres cuatro y seis sesiones como mínimo para asegurar un proceso.
Si te llama la atención, si te interesa aplicarlo en tu empresa, quedamos a las órdenes para asesorarte y brindarte mayor información: contacto@coachingdeltalento.com